Código
de barras
Cuando
se describen las funciones del envase, se dedico un apartado específico a las
del tipo administrativo. Estas funciones se realizan ágilmente gracias a la
lectura óptima de la inscripción en el envase de una notación especial,
denominada Código de Barras.
El
código de barras es un método de codificación que permite su lectura automática
por dispositivos ópticos (escanners), lo cual aporta las siguientes ventajas.
-
Ahorro de tiempo
-
Ahorro de esfuerzos
-
Ausencia de errores
La
técnica de código de barras
Sin
entrar en detalles excesivamente técnicos que no tienen cabida en el presente
contexto, podemos describir a esta forma de codificación como un conjunto de
barras negras separadas por barras blancas; tanto como otras tienen diferente
espesor. La luz emitida por el lector es absorbida por las barras negras y
reflejada por los separadores blancos de forma que el lector puede interpretar
como números. Estos números suelen apárrese también al pie de cada combinación
de barras, de manera que se puede leer también la combinación del código por
los métodos tradicionales.
Los
códigos de barra están regulados en Europa por la asociación EAN (Asociación Europea
de Numeración de Artículos), cuya filial española es la Asociación Española de Codificación
Comercial (AECOC).
La
codificación EAN utiliza dos tipos de códigos. El más amplio es el EAN 13,
denominado así porque consta de 13 dígitos. Los dos primeros, empezando por la
izquierda, corresponden al país fabricante, del propietario de la marca o del
distribuidor de país (que no tiene porque ser el mismo); los cinco siguientes dígitos
son para designar al fabricante del producto y los otros cinco para el producto
en cuestión (a diferencias de los anteriores, estos dígitos gestionados por el
fabricante o propietario de la marca). El último, a la derecha es un digito de
control que asegura una lectura óptima exenta de errores.
Cuando
los productos son pequeños, de manera que físicamente no cabe el código de 13 dígitos,
se utiliza el EAN 8 que, como indica su denominación, solo tiene este numero de
dígitos en la codificación: dos para el país, dos para el fabricante, tres para
el producto y el ultimo para el control de lectura.
Además
de los códigos descritos, que son los utilizados en la distribución de los
productos de gran consumo, existe también la codificación CIP (Código Interno Farmacéutico)
empleado para productos de esta clase. Los productos industriales utilizan una
codificación alfanumérica.
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